Hace unos dias estuve visitando una muy interesante exposición de fotografia de E.O. Hoppé, en la que vi unas fotografias en blanco y negro sobre tipos y personajes curiosos del Londres de los años 20. Y entre esos personajes estaban las camareras nippy, me picó la curiosidad la palabra e investigué sobre ellas, porque desde luego las imágenes me resultaban bastante familiares, por haberlas visto en peliculas o en fotos en otras ocasiones anteriores. Y de ellas va la entrada de hoy.
En sus orígenes la palabra nippy se refería a las ágiles y eficientes chicas que servían el té en la selecta cadena de teterias Lyons & Co. en el Reino Unido. Se ganaron este apodo por la rapidez con la que atendían a los clientes (“nippy” significa rápido). Más tarde se utilizó como una forma coloquial de llamar a todas las camareras y actualmente esta palabra está ya en desuso.
En los años 20 el mundo de la publicidad ya se había empezado a dar cuenta de que una mujer atractiva podía ser un buen reclamo para vender distintos productos y el mundo del té no fue una excepción. Y en enero de 1925, la fotografía de una chica nippy apareció protagonizando una campaña publicitaria en todos los periódicos ingleses, especificando las prendas de su atuendo: “Cofia bien centrada y con monogramas, nada de excesos de maquillaje ni pelos al viento, vestido negro limpio y bien planchado, zapatos bien lustrados, botones cosidos con hilo rojo, dientes cuidados, buena manicura”, que revolucionaron la estética de las mujeres.
la perfecta camarera nippy |
Las nippy llegaron a ser un icono nacional muy popular, especialmente para la clase trabajadora, ya que resultaban muy cercanas y accesibles a la gente y quizás eso fue buena parte de la clave de su éxito. Se hicieron tan famosas que hasta se vendian disfraces con sus uniformes para las fiestas de los niños. E incluso se llegó a hacer un musical sobre ellas, estrenado en 1930, del que luego se extraerían varias canciones que luego tuvieron mucho éxito, como “It must be you” o “The toy town party”. Aunque esas pioneras fashion del estilo de cadenas de fast food desaparecieron tras la Segunda Guerra Mundial.
Y por último, os cuento también algo sobre la historia del gran imperio de estas famosas teterias Lyons & Co.: fueron creadas por 4 jóvenes emprendedores a finales del siglo XIX y llegó a convertirse en una de las más grandes compañias de catering y comida del mundo. Siempre innovadores y profundamente conocedores del gusto de la gente, supieron crear una perfecta relación precio-calidad. Su laboratorio de comida atraía a muchos graduados de Oxford y Cambridge, que querían trabajar allí. Uno de esos graduados se convertiría unos años después en la Primera Ministra del Reino Unido: Margaret Thatcher.
la primera tienda Lyons que se abrió |
La primera teteria Lyons se inauguró en 1894 en el número 213 de Piccadilly (como curiosidad, os contaré que en este mismo año se inauguraron también los famosisimos almacenes ingleses Marks & Spencer, gracias a dos inmigrantes polacos). Pero como iba diciendo, la teteria de Picadilly sería la primera de las 250 teterias que se abrirían después en Londres y en otros lugares del pais y casi siempre los lugares elegidos para establecerlas eran enormes locales situados en esquinas con dos entradas; en el centro de Londres llegó a haber 3 de estas "corner houses", que podía albergar cada una hasta 3.000 clientes. Una de sus mayores exigencias era mantener un alto nivel de higiene y las reclamaciones de los clientes eran un tema muy serio, al que daban la máxima importancia. Se dice que el té que servían era el mejor del mercado y que las mezclas que usaban no estaban a la venta para el público.
Aparte de las teterias extendidas por todo el pais, también llevaban el catering de las fiestas celebradas en el Palacio de Buckingham o en el de Windsor o en otras celebraciones como los Campeonatos de Tenis de Wimbledon o las exhibiciones de Flores de Chelsea. También construyeron el famoso restaurante Trocadero cerca de Piccadilly y otros grandes restaurantes en los que varias orquestas tocaban música e incluso construyeron hoteles y lavanderias, pastelerias, empresas de helados, de empanadas de carne, de salsas de tomate, de té y de café e incluso fueron los primeros en introducir la comida congelada al público inglés. Y también durante la guerra se encargaron de empaquetar las raciones para las tropas que luchaban en Asia y en otras partes del mundo.
Mujeres leyendo en una teteria Lyons de Picadilly Circus |
Despues de la guerra se embarcaron en varios proyectos muy diferentes, de alimentación (como la empresa de los famosos donuts americanos o la cadena de hamburguesas Wimpy, por ejemplo) e incluso crearon la primera empresa mundial de ordenadores (LEO Computers Ltd., Lyon's Electric Office).
Pero como todo tiene un principio y un final, vino el declive de la compañía Lyons & Co. tan rápidamente como habia llegado el éxito, golpeados por la recesión y la crisis del petróleo. En 1978 recibieron una oferta de otra compañía y Lyons perdió su independencia, sobrevivió unos años bajo la nueva dirección de la empresa, vendiendo más “trozos” de la empresa, especialmente los relativos a las bebidas (precisamente Pedro Domecq, en España, fue uno de los nuevos compradores). Y finalmente, tras haber sobrevivido 100 años, después de haber abierto su primera teteria, la primera y original compañía Lyons & Co. llegó a su final en 1998 y con ella se fue todo un icono, testigo de primera mano de los cambios acontecidos en la tradicional sociedad inglesa victoriana del siglo pasado.
Fuente:
en.wikipedia.org
gracesguide.co.uk