UN CAPRICHO DE PARQUE EN MADRID

Templo de Baco

Casa de la vieja

Los árboles del amor están por todos lados

Hace un par de semanas tuvimos en Madrid unos dias de bastante calor y que casi nos hicieron pensar que el verano habia llegado de sopetón y sin avisar, pero no, fue una falsa alarma, porque hemos vuelto al dichoso frio de nuevo. Pero como el fin de semana pasado aún no habia cambiado el tiempo, decidí ir junto con unas amigas a disfrutar el sábado, de un dia en contacto con la naturaleza en un precioso parque que hay en Madrid y que poca gente conoce, quizás porque no está situado en un lugar muy céntrico. Yo lo visité por primera vez hace diez años y me dejó un recuerdo maravilloso y no sé porque había dejado pasar tanto tiempo para volver a verlo, el caso es que aprovechando el buen tiempo decidí que ya era hora de volver y especialmente en época primaveral.

Este parque se llama El Capricho de la Alameda de Osuna y es uno de los parques más bonitos que tiene Madrid. Nació en 1784 cuando los duques de Osuna, una de las familias mas poderosas de aquel momento, adquirieron esta finca para dar rienda suelta a sus inquietudes artísticas y para alejarse de la gran ciudad. Fue la duquesa, doña Maria Josefa de la Soledad Alonso Pimentel, la principal impulsora de este parque, fue considerada como una de las mujeres más inteligentes de la época y protectora de artistas e intelectuales, creó en la finca un auténtico paraiso artístico-natural frecuentado por las personalidades más ilustres de la época.

Cuando murió la duquesa, la finca pasó a un nieto y de éste a otros familiares hasta acabar en manos de un pariente derrochador que perdió toda su fortuna y la finca tuvo que ser subastada para liquidar todas sus deudas.

Durante la Guerra Civil se convirtió en Cuartel General del Ejército del Centro, de cuya época queda un entramado de búnkers que recorren parte del jardin. Acabada la guerra, la finca pasó por manos de varias inmobiliarias hasta que tras décadas de relativo abandono, fue comprado en 1974 por el Ayuntamiento de Madrid, y en 1985 fue declarado Bien de Interés Cultural. Un año más tarde comenzó una remodelación que, en cierta medida, continúa actualmente.

Dentro de él hay 3 tipos de jardines: el francés, el inglés y el italiano. Tiene un palacio, del que por desgracia, sólo se conservan las paredes y es una pena, porque debió de ser una maravilla, parece ser que las habitaciones privadas estuvieron decoradas con obras de los artistas más importantes de la época, tenía un majestuoso salón de baile y tenía también una gran biblioteca que albergaba 6.000 libros. Tiene también un laberinto (que puedes divisar desde arriba pero al que no se puede acceder, pues es de uso sólo del personal del parque) que está al lado del invernadero. Tiene una gran variedad de árboles y flores y es especialmente atractiva la visión de los lilos en esta época del año, además del agradable aroma que se desprende de ellos y según parece, sus flores duran muy poco y se secan enseguida, por lo que es una suerte, poder ir justo cuando están en plena floración.

Y como no me quiero enrollar más, aquí os dejo algunas de las fotos que hice, de algunos de sus rincones, para que veáis lo bonito que es y que comprobéis que quién le puso el nombre a este parque sabía lo que se hacía………

La glorieta de los Emperadores

La ermita

El Palacio de los duques de Osuna

El jardín italiano

La casita china

El fortín

El abejero

¡Espero que os hayan gustado!